Un círculo
1.
Y dice,
una hermosa noche caminando por septiembre,
colega,
lo bien que sienta pasear por la ciudad
podríamos escuchar algo de música (pero ya la oigo)
podríamos entrar en algún bar (pero de este ocaso
no hablo,
de luz
que mata,
luz de la buena, la que tiene tu colega,
no hablo)
Mira, tengo gente por ahí, en Lavapiés,
quieren hacer algo
como todos, digo yo
sueño con mis manos en sus caderas
sueño con su lengua mentol cerveza
con la catarata de su alma
y yo al borde
salpicado
en mi habitación oscura
—Este bar es una mierda, ¿nos vamos?
—Nos vamos.
—¿Tienes lo tuyo?
—Lo tengo.
2.
He escuchado lo que dijiste,
debió de ser el cielo redondo como las cabezas de las cerillas
bueno, a veces las cosas arden,
todo es susceptible de arder,
mira, no hay ningún amor mejor que otro,
mira, pon tu cabeza en mi hombro
hagamos que los idiotas entiendan,
como en las novelas francesas,
que, si llega
la muerte,
le añada algo al alto capricho
de nuestro domingo
y sigamos mientras tanto como si nada,
mira, calle abajo conozco un buen lugar,
comida Thai
garganta de marfil.
y 3.
Como todo lo que tuve
y no supe mantener
Oh, mis queridos, benevolentes espejos
¡qué lejos quedó la guerra! ¡y francia! y el azur
ese que te cuentan
a mí no no a mí a otro con eso
como el dinero cuando llegaba en el mejor momento,
como un tema de la Velvet cuando ya nada podía salvar este lugar,
como un poeta chino haciendo malabarismos a la orilla de un río,
una vaga idea
de lo que pude ser
tengo
destellos frente a mí
los ojos de los gatos fijos frente a mí
algo de tabaco
y un amor
No sé
mírame sonreír
esta es mi gran decisión.